Puede que el concepto de subconsciente no sea precisamente el más claro de entender, por lo que generalmente se realiza haciendo uso de la metáfora de un iceberg. De esta forma, la consciencia que es todo ese conocimiento instantáneo de nuestros actos y reflexiones, vendría siendo la punta del iceberg o todo lo que se ve a simple vista. Por contraparte, todo lo que se encuentra por debajo de la línea de flotación y que no podemos conocer con certeza representaría al subconsciente.
Así, este término originado con el psicoanálisis hace referencia a todo lo que tenemos guardado por debajo de nuestra consciencia. Muchas veces se ha dicho que los miedos y deseos reprimidos se encuentran en ese lugar, algo que así como la base del iceberg no se puede ver con facilidad.
¿Qué es lo que guarda el subconsciente?
Este espacio desconocido es el que se encarga de guardar datos en la memoria, siendo algo que no podemos percibir en primera instancia. El subconsciente se encarga también de ejecutar nuestros hábitos, ya que contiene la información necesaria para realizar funciones que tenemos interiorizadas y que muchas veces escapan de nuestro control, la respiración, la digestión o la circulación son algunas de estas.
Pero además, el subconsciente puede contener nuestros miedos más profundos o la información relacionada con experiencias traumáticas de nuestra infancia o adultez. Esas cosas que muchas veces de manera consciente no quisiéramos recordar.
Cómo acceder al subconsciente
Muchos expertos son los que afirman que para acceder al subconsciente es mediante un estado de relajación total. Puede que parezca imposible además de complicado, pero hay otras formas de acceder a este espacio. Se dice que para llegar a esta parte tan desconocida de nuestra memoria es necesario autosugestionarse. De esta forma, la repetición de pensamientos en reiteradas ocasiones podría provocar órdenes mentales que logren transmitir el mensaje.
Así, si por ejemplo si una persona se muestra convencida de que no puede lograr un objetivo concreto en su vida, y repite en su mente o en voz alta esa negativa, logrará que su subconsciente de las órdenes para que eso suceda. De esta forma, se provoca asimismo el auto-sabotaje.
¿Se puede reprogramar el subconsciente?
Los hábitos son los elementos claves que el subconsciente toma para programarse. Y es que, toda la información que recibe proviene de nuestro lado consciente, y esta no es cuestionada ni analizada, sino que llega allí y es asumida como cierta. También existe otra forma de programar el subconsciente, y es con altos impactos emocionales o traumas, así como con la repetición de pensamientos como habíamos dicho anteriormente.
En ambos casos los pensamientos y experiencias pasan del lado consciente al subconsciente generando miedos que nos mantendrán alerta, o en el segundo caso puede generar la autosugestión con la que podrá enviar órdenes mentales a nuestra consciencia.
Inconsciente colectivo según Jung
A diferencia de lo que dice la psicología tradicional sobre que el complemento del individuo es lo social, la psicología analítica lo define como colectivo. Este complemento no solo hace referencia al grupo de personas que conforman la sociedad, sino que pone énfasis en lo que estas personas tienen en común. Así Carl Jung describió que el individuo tenía una dimensión mental más allá de la consciencia que llamó inconsciente, por lo que lo colectivo también debía tener su estado inconsciente.
De acuerdo con Jung, este inconsciente colectivo es algo común que tiene la sociedad compuesta por los arquetipos que modelan la individualidad de cada quien, tratándose de todas esas experiencias que compartimos todos los seres humanos.